Nos están deshumanizando en nombre del humanismo. Un humanismo que pretende descansar en la masa, que desprecia al individuo y martilla lo excepcional. Un humanismo irrealista, etéreo, lunático
buenismo
Puede agravarse cuando esta “clase” con vocación de escenificar, gritar y pedir, desciende hacia la lucha de clases callejera, donde generalmente participan en rejuegos políticos. Y se organizan en “partidos políticos”, que en realidad son lanchas de desembarco para ir a tomar el botín acumulado por los realmente productivos
La felicidad de cada individuo no debe ser un “amor” hallado en internet, ni la reproducción por inseminación, la promiscuidad hippie, el sexo grupal, de fricción- ficción, de drogas y comida química
La mayoritaria tradición verbalista o parlamentaria de occidente, no impide que uno que otro hombre de a caballo declare a sus alternancias políticas "enemigos del pueblo" y les envíe Camisas Pardas o Avispas Negras para reprimirlos o liquidarlos
Las llamadas Ciencias Políticas y la Sociología, no son ciencias, pero al vestirse con la toga y el birrete, quieren ser científicas a como dé lugar. Y con tal de hacerse un espacio en el teatro social, mienten descaradamente
Los buenos, los malos y los feos (o miradas al buenismo, el marxismo y el academicismo)
Algunos de estos “ingenieros” son personas con evidentes agendas desde sus traumas personales y sesgos mentales. Este es el caso de algunos de los grandes referentes intelectuales actuales, como Marx, Sartre, Foucault... Es por haber entronizado a estas figuras envenenadas y resentidas, falsamente humanistas, que estamos caminando a ciegas cuando ya podríamos avanzar iluminados
Los porqués del demoledor triunfo de Donald J. Trump y el tsunami rojo
Trump sobrepasó los 300 votos electorales contra 226 de Kamala Harris. Una diferencia de 75 sufragios del Colegio Electoral y casi los 93 que había en juego en los siete llamados estados “bisagra”. Todos se los llevó Trump. Una clara paliza a Harris y a la extrema izquierda de Bernie Sanders, Alexandria Ocasio-Cortez, Ilhan Omar y muchos otros congresistas y donantes
El tiempo ha transitado por nuestra tierra, con su paso lento y continuo, y nos ha visto empobrecernos y entristecernos, nos ha visto sufrir en silencio y a gritos, pero siempre al ritmo obsesivo de las voces de mando que nos piden seguir caminando “Hasta la victoria siempre”
Ustedes ya no serán nunca el signo de la esperanza, del porvenir deseable, de la ilusión que lleva a entregar la vida
Camila Acosta: La intolerancia ante los mitos y las mentiras
En un programa dominicano, le intentaron rebatir que en la Isla hubiese una dictadura, asegurando que el país era “un referente para la región en muchos aspectos”
Trump y los republicanos ganaron a lo grande con la ayuda de los demócratas que estaban hartos de la locura de la izquierda. Así lo reflejaron tanto los que votaron como los que decidieron no hacerlo. Un votante demócrata tradicional que sí votó por Kamala, en realidad votó tácitamente por Trump. Antes había «demócratas de Reagan». Ahora hay demócratas de Trump. Esto hay que aprovecharlo