Nadie se amaba tanto a sí mismo, como el ególatra de Fidel Castro

En sus últimos años no le hacía mucho favor la imagen de un anciano testarudo y frágil que escribía confusos editoriales para CubaDebate y el periódico Granma que llamaba Reflexiones y firmaba como “Compañero Fidel”,  en los que hacía predicciones apocalípticas y uso y abuso del corta y pega

CubaLibre19/08/2025 Luis Cino
Captura de pantalla 2025-08-14 a la(s) 9.08.24 a.m.

En 1959, unas semanas después de su entrada triunfal en La Habana al frente del ejército guerrillero que derrocó al régimen de Fulgencio Batista, Fidel Castro  ordenó retirar de la calle 41, cerca del campamento militar Columbia, en Marianao, la estatua que le había hecho el escultor italiano Enzo Gallo y dictó una ley para evitar el culto a su persona.

Antes de morir, el 25 de noviembre de 2016, dejó dispuesto que no se le hicieran monumentos y que su nombre no fuese utilizado para bautizar cosa alguna.

Probablemente la renuencia del Máximo Líder a que le dedicaran estatuas fue para impedir que un día sus enemigos pudieran derribarlas y profanarlas. 

En Cuba no hay estatuas de Fidel Castro. Ni falta que hace. Su rostro barbudo, generalmente con treinta o cuarenta años menos de los 90 que tenía cuando murió, está presente a cada paso en Cuba: en la primera plana de los periódicos, en la TV, en vallas y carteles en las calles, en fotos colocadas en sitios prominentes en oficinas, escuelas, hospitales o cuarteles de la policía. Desde 1959 ha sido así.

Captura de pantalla 2025-08-12 a la(s) 1.26.58 p.m.El Maleconazo: 31 años después y con más motivos para la rebelión

A falta de estatua, Fidel Castro tiene un monolito funerario en el cementerio Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba, donde yacen sus restos, cerca de los de José Martí, Carlos Manuel de Céspedes y Mariana Grajales. Tiene guardia de honor permanente y es lugar obligado de peregrinación para los fieles del castrismo. Algunos de los visitantes parecen caer en trance. Y el escultor que hizo el monolito asegura que Fidel se le aparece y conversa con él.        

Si Fidel Castro quería evitar el culto a la personalidad y que lo endiosaran como a Mao Zedong y Kim Il Sung, no hizo mucho por impedirlo. Todo lo contrario.   

Terco, incansable, opinaba de todo, estaba presente en todas partes, lo mismo en los huracanes que en los congresos científicos. Su palabra era ley, sus órdenes  no se discutían, ¡ay de quien se atreviera a contradecirlo!

Sus discursos, que duraban tres, cuatro horas o más, versaban  lo mismo de economía que de política internacional, o de ganadería. Poco antes de su retiro por enfermedad, en el programa televisivo Mesa Redonda  explicó cómo usar las ollas chinas y recomendó poner en remojo los frijoles varias horas antes de cocinarlos.    

Captura de pantalla 2025-06-28 a la(s) 11.44.05 p.m.Los cubanos estamos perdiendo la autoestima nacional

Siempre era ensalzado, considerado infalible. Era la personificación del Gobierno, el Estado, el Partido,  de “la Patria, la Revolución y el Socialismo”.  Había que agradecerle todos y cada uno de “los logros de la revolución”. 

Sus funerales, a lo norcoreano, con luto riguroso, duraron nueve días. Sus restos, en un armón verde olivo, recorrieron todo el país antes de ser depositados en la roca de Santa Ifigenia.

El culto a Fidel Castro se reforzó con su muerte. El recuento-letanía póstumo de sus hechos y discursos fue lo que necesitaba para oxigenarse. 

En sus últimos años no le hacía mucho favor la imagen de un anciano testarudo y frágil que escribía confusos editoriales para CubaDebate y el periódico Granma que llamaba Reflexiones y firmaba como “Compañero Fidel”,  en los que hacía predicciones apocalípticas y uso y abuso del corta y pega.

La muerte vino a darle a la figura de Fidel Castro el segundo aire que necesitaba. ¡Y qué segundo aire!

IMG_7926Revolución cubana: nacer sin historia y vivir sin país

Los continuadores de su régimen, aunque suelen contradecir sus políticas, no dejan de invocar a Fidel Castro y citar frases de sus discursos, vengan o no al caso.

El desastre en que han sumido el país los mandamases de la continuidad ha hecho que justo cuando ya menguaban los seguidores de Fidel Castro, se multiplique su número entre las personas, sobre todo ancianas, que olvidadas de los desastres del ayer, de las tantas veces que tuvo que convertir los reveses en victoria o en algo que lo pareciera, repiten que “con Fidel estas cosas no pasaban”. 

Este año, como ocurre cada vez que se acerca el 13 de agosto, día en que nació Fidel Castro en Birán, en 1926, los medios oficialistas llevan días desbordados con el recuento de los hechos y anécdotas del Comandante y las loas a “su legado”. Y ya pueden imaginar cómo será la cantaleta el próximo año 2026 cuando sea su centenario.    

SempicubaAmbivalencia, ubicuidad y oportunismo

Publicado originalmente en Cubanet

Screenshot 2024-04-09 at 11.15.11 PMBreve historia del Mariel: el primer éxodo del desencanto

perfil luis cino

WhatsApp Image 2025-07-31 at 13.23.5311J: reclamo contrarrevolucionario
Captura de pantalla 2025-07-06 a la(s) 2.13.48 p.m.Los cubanos desaprovechamos las enseñanzas de José Martí

Te puede interesar
Captura de pantalla 2025-07-26 a la(s) 12.13.06 p.m.

Palabras a los intelectuales y la cultura del rebaño

Luis Cino
CubaLibre28/07/2025

Luego de seis décadas de cultura domeñada, censuras y prohibiciones, los testaferros intelectuales del castrismo se han dado a la tarea de reinterpretar las Palabras a los Intelectuales para mostrar que la ordenanza del Máximo Líder dejaba bastante campo a la creación artística, siempre que fuera “dentro de la Revolución”

Lo más visto
WhatsApp Image 2025-07-31 at 13.18.03

El saludo de Solzhenitsyn

Julio Lorente
Bogaciones17/08/2025

Es en la persona de Alexander Solzhenitsyn donde se concreta la imagen arquetípica del disidente contemporáneo, el hombre que da voz al horror silente, el hombre que articula el relato de los que yacen en fosas comunes

Sempicuba

Ambivalencia, ubicuidad y oportunismo

Antonio Correa Iglesias
Bogaciones07/08/2025

El mandato de silencio, justificado bajo la falacia de la intemporalidad política, ha inoculado la sospecha y la autocensura como prerrequisitos de supervivencia intelectual

Captura de pantalla 2025-08-12 a la(s) 6.43.23 a.m.

Para entender a Volodimir Zelensky

Ricardo Israel
Autores12/08/2025

Si hay cese del fuego, su futuro va a estar marcado por la convocatoria a elecciones, y sería importante para él seguir en detalle lo que hoy está pasando en la política interna de EEUU

Captura de pantalla 2025-08-14 a la(s) 9.08.24 a.m.

Nadie se amaba tanto a sí mismo, como el ególatra de Fidel Castro

Luis Cino
CubaLibre19/08/2025

En sus últimos años no le hacía mucho favor la imagen de un anciano testarudo y frágil que escribía confusos editoriales para CubaDebate y el periódico Granma que llamaba Reflexiones y firmaba como “Compañero Fidel”,  en los que hacía predicciones apocalípticas y uso y abuso del corta y pega