
Lo más preocupante es ver como la población en lugar de atacar al verdadero culpable, el modelo económico del MAS, espera, y hasta festeja, que las autoridades salgan a los mercados a controlar precios, castigar comerciantes y decomisar alimentos
Pero entre los héroes de ficción castristas hubo algunos que alejados del realismo socialista, demasiado de carne y hueso, disgustaron y encolerizaron a los mandamases y sus comisarios
Autores01/02/2024 Luis CinoEn la literatura soviética abundaron los héroes con virtudes suprahumanas, como el Pavel Korchaguin de Así se forjó el acero, de Nikolai Ostrovski, y Alexei Maresiev, el piloto sin piernas protagonista de la novela Un hombre de verdad, de Boris Polevoi.
En Cuba, en los primeros años de la década de 1960, el régimen castrista, como parte de su luna de miel con el Kremlin, promovió la lectura de esos dos libros y otros muchos más del realismo socialista soviético que querían fueran imprescindibles en las mochilas, lo mismo de los milicianos movilizados para cavar trincheras que de los que iban movilizados a cortar caña.
Los mandamases aspiraban a que los cubanos tomáramos ejemplo de aquellos héroes comunistas de los libros soviéticos, nos desembarazáramos del individualismo y “los rezagos del pasado burgués” y lo diéramos todo en la construcción de la nueva sociedad. Para ese propósito adoctrinador, los héroes soviéticos, demasiado distantes de nuestra idiosincrasia, fueron complementados por otros de fabricación nacional.
Algunos, exagerando sus hechos, fueron tomados de la realidad, como Eduardo García, el miliciano que según afirmaban, moribundo, escribió “Fidel” con su sangre en una pared; Alberto Delgado, el chivato del Escambray al que dedicaron la película El hombre de Maisinicú; y sobre todo, Che Guevara, la muy idealizada apoteosis del superhombre castrocomunista.
Otros fueron sacados de la ficción, como los protagonistas de las novelas de Manuel Cofiño y de los autores de tramas policíacas para los concursos literarios auspiciados por el MININT; o los personajes de series televisivas sobre infiltrados del G-2, como Julito, el pescador y En silencio ha tenido que ser.
Pero entre los héroes de ficción castristas hubo algunos que alejados del realismo socialista, demasiado de carne y hueso, disgustaron y encolerizaron a los mandamases y sus comisarios. Fue el caso de los milicianos de Condenados de Condado, de Norberto Fuentes, o de Eduardo Heras León en Pasos sobre la hierba y La guerra tuvo seis nombres; o Carlos Pérez Cifredo, el protagonista de Las iniciales de la tierra, de Jesús Díaz, un idealista convertido en dogmático, a pesar de sus dudas y contradicciones, que evoca su vida frente a la planilla cuéntamelo-todo para el proceso de ingreso en el Partido Comunista.
Pérez Cifredo, junto al intelectual burgués dubitativo frente a la revolución de Memorias del subdesarrollo, de Edmundo Desnoes; Mario Conde, el desmerengado policía de las novelas de Leonardo Padura; Diego, el gay de Fresa y Chocolate; y otros personajes de Senel Paz, y de autores como Ena Lucía Portela y Wendy Guerra vienen a ser los antihéroes que parió la frustración y el desencanto (y conste que no voy a referirme a escritores exiliados o abiertamente opositores y excluidos en Cuba).
En casi toda la literatura del mundo comunista, pese a la censura, hubo esos antihéroes. Ahí están el cosaco Grigori Melejov, de El Don Apacible, de Mijail Sholojov, y los personajes salidos de la pluma de Mijail Bulgakov, Alexander Solzhenitsyn, Vasili Grossman y Milán Kundera.
A casi todos esos escritores, incluso a los prohibidos —particularmente a esos— nos arreglamos para leerlos en Cuba. Pero, desafortunadamente, nos perdimos a Andrei Platonov. Particularmente, su novela satírica Chevengur y a sus protagonistas, Sasha Dvanov y Stepan Kopionkin, que vendrían a ser los ridículos equivalentes soviéticos de Don Quijote y Sancho Panza.
Chevengur fue prohibida por Stalin en 1927 y no pudo ser publicada en la Unión Soviética hasta 1988. Pero fue subvalorada y tardó en reconocerse su valía. En Cuba, muy pocos han podido leerla. Ojalá Sasha y Kopionkin sean más conocidos entre nosotros e inspiren personajes que satiricen al castrismo y su continuidad inmovilista, porque ridículo es lo que tiene de sobra.
Publicado originalmente en Cubanet. Luis Cino Álvarez reside en Arroyo Naranjo, Cuba, y a pesar de la represión desde 1998 ejerce el periodismo independiente. Entre 2002 y la Primavera Negra de 2003 perteneció al consejo de redacción de la revista De Cuba. Fue subdirector de Primavera Digital. Es colaborador de CubaNet desde hace 20 años. Trabajó como profesor de inglés, en la construcción y la agricultura. Sueña con poder dedicarse por entero y libre a escribir narrativa. Le apasionan los buenos libros, el mar, el jazz y los blues.
Lo más preocupante es ver como la población en lugar de atacar al verdadero culpable, el modelo económico del MAS, espera, y hasta festeja, que las autoridades salgan a los mercados a controlar precios, castigar comerciantes y decomisar alimentos
Detonante de la libertad para el pueblo iraní y otros pueblos, porque están dirigidas contra la amenaza nuclear, terrorista y expansionista del régimen teocrático, una dictadura brutal y sangrienta llena de dinero con el que agrede a las democracias y sostiene el crimen
Su arte multifacético, prolífico, híbrido, figurativo y poético, es una perfecta confluencia de lo cubano, lo español y lo universal
¿Será que los bolivianos tenemos el talento de volver al pasado y elegir un frente capaz de sacarnos de la crisis nacional y aplicar una nueva perestroika?
Se confirma que la medida estaría dirigida a funcionarios de naciones centroamericanas y sus familiares
Demasiadas personas no hablaron cuando importaba. No estoy seguro de por qué se hace ahora, no sé si es para salvar reputación y/o trabajo, si es por credibilidad o quizás para ganar legítimamente algún dinero
Venezuela es un país ocupado desde que no entregaron el poder al presidente electo Edmundo González y la vicepresidenta designada María Corina Machado
Fue arrestado por tocar “la música del enemigo”. Tomó el camino del exilio en 1984. En Miami integró el grupo Poem. Uno de sus últimos y más ambiciosos trabajos fue "Ecos", suite para orquesta y banda de rock de Mike Porcel
Lo más preocupante es ver como la población en lugar de atacar al verdadero culpable, el modelo económico del MAS, espera, y hasta festeja, que las autoridades salgan a los mercados a controlar precios, castigar comerciantes y decomisar alimentos
A Walterio Carbonell los inquisidores demoraron décadas en rehabilitarlo. Y nunca lo hicieron totalmente. Sus últimos años los pasó relegado a un puesto de poca importancia en la Biblioteca Nacional
Su arte multifacético, prolífico, híbrido, figurativo y poético, es una perfecta confluencia de lo cubano, lo español y lo universal
El beneficio no fue extendido por Biden y el 20 de enero, día de su investidura, su sucesor, el republicano Donald Trump, firmó un decreto para ponerle fin
La legalización de estos inmigrantes sería un enorme logro político para el presidente Donald Trump y los republicanos, así que es muy probable que presenten un proyecto de ley en el Congreso
Cualquier solicitud enviada, a partir del 3 de julio, con una edición diferente a la del 20 de enero de 2025 será rechazada, incluso si algunas páginas del formulario no coinciden
"Lo que presencian en California es un ataque a la paz, a la estabilidad, al orden público y a la soberanía nacional, perpetrado por alborotadores que portan banderas extranjeras con el objetivo de continuar una invasión en nuestro país"
Detonante de la libertad para el pueblo iraní y otros pueblos, porque están dirigidas contra la amenaza nuclear, terrorista y expansionista del régimen teocrático, una dictadura brutal y sangrienta llena de dinero con el que agrede a las democracias y sostiene el crimen
El presidente también afirma que Irán debería haber firmado un acuerdo nuclear con Estados Unidos
“Estos ataques degradan directamente la capacidad de Irán para amenazar a Israel y a la región”, señalaron las FDI en un comunicado publicado en X