Ayer (hace 43 años)

Un salto al vacío dejando atrás todo lo que uno quería y conocía

Letras27/10/2023 Armando Álvarez
Screenshot 2023-10-27 at 1.27.25 AM
"El ayer de Armando",LLL, 2023

Hoy hace 43 años que salí

y lo recuerdo (como se dice) como si fuera ayer.

Nadie me esperaba

porque nadie sabía que llegaba.

Era eso: salir, escapar, una asfixia

con solo 20 años.

Un salto al vacío

dejando atrás todo

lo que uno quería y conocía.

Salí sin nada, no traje nada,

ni una muda de ropa,

ni un cepillo de dientes, 

ni un libro de Martí,

ni una medallita de la Caridad del Cobre.

Salí solo con mis recuerdos

y así todavía ando por el mundo.

Me duele cuando veo a los recién llegados

porque sé en carne propia

lo que van a tener que pasar.

Cada emigrado es un sueño, un talento,

una posibilidad menos en Cuba.

Esa Cuba que te asfixia

y que al mismo momento de abandonarla

la comienzas a necesitar más que nunca.

43 años pueden ser muchos años

pero puede ser un instante también.

Para mí fue ayer.

(En 1980 Armando Álvarez tenía 20 años. Hijo de un expreso político, en medio de la atmósfera de odio desatada por el régimen en los meses del éxodo del Mariel, se enfrentó a una turba castrista frente a la Oficina de Intereses de EE.UU. en La Habana. Pocos meses después se exiliaría en New Jersey donde reside desde entonces).

Te puede interesar
Captura de pantalla 2025-04-20 a la(s) 3.17.29 a.m.

Vargas Llosa y ese extraño imán que tiene la muerte

Luis Leonel Leon
Letras15/04/2025

De haberse prestado para aquella desvergüenza, Vargas Llosa hubiera quedado atrapado, quizás para siempre, en el chantaje del régimen de La Habana, como otros escritores y artistas. Y no hubiera sido el escritor ni el promotor del liberalismo clásico que fue

Captura de pantalla 2025-04-15 a la(s) 11.38.37 a.m.

Los títulos más célebres de Mario Vargas Llosa

Redacción ENC
Letras14/04/2025

En este libro de trasfondo biográfico, Vargas Llosa da forma literaria a su relación con su tía Julia Urquidi, divorciada y 10 años mayor (14 en esta ficción autobiográfica). Una relación a la que se oponía su padre con todas sus fuerzas, y que en la sociedad limeña de los años 1950 era un escándalo. El contrapunto viene de la mano del personaje de Pedro Camacho, un excéntrico folletinista radiofónico y compañero de trabajo de "Varguitas"

Lo más visto
image

Un pequeño apocalipsis

Roberto Méndez Martínez
Autores21/05/2025

Algunos prefieren pasar el apagón a la puerta de su hogar en espera de una brisita redentora y hasta hay quien en medio de la noche que es más noche quiere venderte frituras, caramelos, preservativos y sustancias innombrables