
Memorias ilustradas de un cubanito que nació con la involución: un enema de plutonio para los castristas
El lavado de cerebro es algo que no viene solo. Viene previamente acompañado de algo que se llama miedo. Si tus padres tienen miedo, claro está que no podrán oponerse a ese lavado de cerebro. Al contrario, debían siempre dar muestras de su apoyo al comandante y a la revolución























